Este exquisito vino tinto se elabora a partir de las uvas de variedad Mencía en las bodegas Joaquín Rebolledo en el corazón de Valdeorras, Galicia, España. Joaquín Rebolledo Mencía, es un vino joven que maravilla con su color picota cubierto con ribete amoratado, su aroma a cereza, mora y frambuesa con ligeras notas minerales, y su sabor fresco, untuoso, ligero y armónico. Gracias a estas propiedades, es un vino ideal para acompañar la comida italiana y mediterránea, los gratinados, asados, estofado y bacalao en todas sus modalidades
El vino tinto mencia Crego e Monaguillo es uno de los vinos más reconocidos de la D.O Monterrei.
Elaborado con Mencia, Arauxa (Tempranillo ) y Merenzao. Color rojo granate y ribete violáceo, buena capa y buena lagrima.
Nariz intensa y compleja, frutos rojos de mora, fresa y frambuesa, notas vegetales y espaciadas de café, cacao, chocolate, mineral y ligeramente floral, jazmín.
Boca envolvente, glicérica y aterciopelada, de estructura media, taninos dulces. Goloso y fácil de beber, retronasal de frutas y especias, buena persistencia.
Ponte da Boga Bancales Olvidados 2017 es un vino tinto afrutado con aromas destacados de fruta roja madura, notas florales, herbáceas y toques especiados. En boca es fresco, vivo y muy alegre gracias a su gran acidez. El final es persistente y muy agradable
Ponte da Boga Bancales Olvidados es un vino tinto monovarietal de Mencía elaborado por la bodega gallega Ponte da Boga en la D.O. Ribeira Sacra.
Ponte da Boga es una bodega gallega que goza de una tradición y unos viñedos ancestrales de lo más auténtico. Ubicados en Terras Caldelas desde 1898, han sabido trabajar las características pendientes laderas de la zona a través de una viticultura heroica y una vinificación de vanguardia. En la actualidad la bodega pertenece a Corporación Hijos de Rivera.
Ponte da Boga Bancales Olvidados procede de pequeñas parcelas singulares sobre los ríos Bibei y Sil. Ocupadas por cepas viejas plantadas en suelos de pizarra y esquistos y, bajo una climatología contrastada, proporcionan una producción muy escasa pero de gran calidad. La vendimia es manual en el momento óptimo de maduración.
Tras despalillar y prensar las uvas, Ponte da Boga Bancales Olvidados se somote a una fermentación alcohólica durante 10 días con maceración y suaves remontados. Después continua la fermentación maloláctica y la crianza en barricas de roble francés en segundo y tercer uso dentro de la bodega a lo largo de 10 meses.
Ponte da Boga Bancales Olvidados es todo un Mencía en estado puro. Un vino tinto fruto de una orografía y unas condiciones climáticas de lo más particulares.
